Espero que terminemos a tiempo.
Odio que discutamos así.
Me sorprendí de que estuvieses en la fiesta.
También en
subordinadas sustantivas con función de sujeto, con verbos de objeto indirecto obligatorio:
alegrar, entristecer, desilusionar, deprimir, angustiar, entusiasmar, enojar,
enfurecer, gustar, sorprender, extrañar, molestar, importar, interesar,
encantar, parecer mal/bien.
Te alegra que puedan interpretar nuestras ideas
tan bien.
Le sorprende que estén tan apurados por firmar el
contrato.
Me extraña que aceptes un trabajo así sin
consultarme primero.
Nos molesta que tomes estas decisiones solo, sin
consultarnos.
Ambos tipos de
verbos pueden ir acompañados de una proposición subordinada sustantiva o de una
construcción de infinitivo con las mismas funciones.
Odio que discutan así.
Odio trabajar tan apurado.
Verbo + construcciones de infinitivo
Los verbos van
acompañados de un infinitivo cuando las acciones de los dos verbos, el
principal y el subordinado, recaen sobre la misma persona, el verbo principal
está conjugado y el subordinado está en infinitivo.
Odio trabajar tan apurado.
“Yo odio” y “yo
trabajo”. Los dos verbos, odiar y trabajar, se refieren a la primera persona
singular, yo; odiar está conjugado y trabajar va en infinitivo.
Verbo + subordinada con subjuntivo
Cuando en estas
construcciones el verbo principal se refiere a una persona y el verbo
secundario se refiere a otra, los dos verbos están conjugados y el verbo
secundario debe ir en subjuntivo.
Odio que discutan así.
“Yo odio” y
“ellos discuten”. El verbo principal odiar se refiere a la primera persona del singular,
yo, y el verbo discutir se refiere a la tercera persona del plural, ellos. Por
lo tanto, discutir va en subjuntivo.
Existe un uso del Subjuntivo, popularizado por medios de difusión argentinos y de amplio predicamento en el porteño medio, que combina tiempo pasado con Sub. Presente y que "rechina" como un mal uso de la lengua; para el caso:
ResponderEliminar-Me sorprendí de que estés en la fiesta
en lugar del ejemplo por Ud. mencionado.
¿Es este un uso legítimo desde el punto de vista gramatical o simplemente debe verse como un "hecho de habla"?
Hola Murdoch:
ResponderEliminarEl ejemplo que mencionas, lamentablemente, es un error gramatical común y difundido que cometemos los argentinos.
Lo correcto sería:
Me sorprende que estés en la fiesta.
Pero si el verbo regente está en pretérito indefinido, nunca el subordinado puede estar en presente.
Este error me suena a otro muy escuchado: casi me caí; en vez de casi me caigo.
Saludos.