Los futuros y los
condicionales pueden expresar, además de tiempo, otros significados, a los que
denominamos “modales” porque tienen que ver con motivaciones subjetivas del
hablante. En los ejemplos 1 y 2 expresan cortesía y en 3 y 4 deseo o
sugerencia.
1) ¿Me daría fuego, por favor?
2) ¿Me pasarías la sal?
3) Me alegraría verte, Felipe.
4) ¿Te gustaría ir al teatro el domingo?
Con el verbo
querer el condicional alterna con el pretérito imperfecto de subjuntivo:
Querría / quisiera comprarme un barco.
Incertidumbre o conjetura
¿Qué diferencia
los enunciados a. y b. de los siguientes ejemplos?
a. Ahora son las 8.
b. Ahora serán las 8.
a. Eran las doce cuando llegó María.
b. Serían las doce cuando llegó María.
En los enunciados
de a. el hablante hace una aserción, es decir, afirma algo de lo que está
seguro. En los de b., en cambio, el hablante no está seguro y utiliza el futuro
o el condicional para conjeturar en el presente o en el pasado, respectivamente.
Idéntica
situación se da con las formas compuestas:
a. Vi la película tres veces.
b. Habré visto la película tres veces.
a. Ya había oscurecido cuando llegaron.
b. Ya habría oscurecido cuando llegaron.
En estos casos,
la inseguridad del hablante se refiere al pasado. Observemos que el futuro
perfecto de incertidumbre se correlaciona con el pretérito indefinido, y el
condicional compuesto con el pretérito pluscuamperfecto que, recordemos, señala
un acontecimiento previo a otro anterior al origen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario