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jueves, 6 de febrero de 2020

Cómo distinguir las oraciones sustantivas con “si” de las condicionales con “si”


La conjunción si, junto con que, son los nexos de las oraciones subordinadas sustantivas. Este tipo de subordinadas pueden realizar cualesquiera de las funciones sintácticas propias de un sintagma nominal: sujeto, complemento directo, complemento indirecto; además de ejercer las mismas funciones que los sustantivos en la oración simple. Por lo tanto estas oraciones siempre se pueden sustituir por un pronombre:
Deseo que vengas > Deseo eso.
No dijo si era bueno > No lo dijo.

Las oraciones sustantivas encabezadas por pronombres o adverbios interrogativos son interrogativas indirectas. Si es el conector que introduce las interrogativas indirectas totales, las cuales pueden contestarse con sí/no/quizá, e introducen una pregunta:
Me pregunto si habrá llegado > Me lo pregunto.
No dijo si era bueno > No lo dijo.

Las oraciones condicionales con si no se pueden sustituir por pronombres:
Me lo dirá si soy bueno > Me lo dirá en ese caso.
Veremos la película si llegamos a tiempo > La veremos en ese caso.

viernes, 2 de marzo de 2018

El orden de las palabras en la oración


Las palabras que forman una oración no siguen un orden establecido al azar, sino que la lengua impone ciertas condiciones que deben tenerse en cuenta para que el mensaje sea claro y comprensible. El español tiene bastante libertad constructiva, pero normalmente los elementos sintácticos deben respetar una jerarquía.

La organización recomendada es la siguiente:

1) Núcleo del sujeto
2) Complementos del sujeto
3) Verbo
4) Complementos del verbo
5) Complementos de cada complemento

El verbo constituye el núcleo de la oración y las restantes unidades, que solo tienen sentido en relación con él, son sus términos adyacentes o subordinados.

Tomando como ejemplo la oración:
Los alumnos de la escuela realizaron los trabajos de clase durante las vacaciones de verano.
Los alumnos de la escuela (sujeto)
realizaron los trabajos de clase durante las vacaciones de verano (predicado)

En el sujeto, la palabra más importante, los alumnos, va seguida de su complemento, de la escuela. En el predicado, al núcleo de la oración, realizaron, le sigue un complemento directo y un complemento circunstancial de tiempo, organizados del siguiente modo: primero, el elemento principal de cada uno de ellos (los trabajos y las vacaciones) y después, sus complementos determinativos (de clase y de verano).


lunes, 9 de octubre de 2017

Oraciones coordinadas copulativas: conjunciones y, ni. Ejemplos


Dos o más oraciones son coordinadas copulativas cuando, pudiendo subsistir simplemente yuxtapuestas, se enlazan mediante las conjunciones y, ni, para expresar un sentido completo.
La conjunción y tiene la variante e ante palabras que comienzan con la vocal i- (o por -hi), pero ambas significan que lo nombrado por las unidades coordinadas, se suma, se da a la vez y conjuntamente:
Iremos en barco y volveremos en avión.
Recogí las naranjas e hice mermelada.

La conjunción y
Esta conjunción puede reforzar su significado de adición con las partículas enfáticas aun y hasta, que siempre la siguen y son átonas como ella, o con el adverbio incluso:
Me gritó y aun me insultó (…e incluso me insultó).
Tropezaron y hasta llegaron a caer (…e incluso llegaron a caer).

Los coordinadores normalmente se sitúan entre unidades de la misma categoría (sustantivo, verbos, adjetivos o adverbios). Únicamente y se utiliza a veces entre palabras de distinta clase, pero solo si entre ellas se hace una pausa que indica la omisión del verbo de la primera oración:
Apenas una niña, y ya era madre.
¿Tan grande, y aún usa chupete?
Con la comida lista, y él no aparecía.

La conjunción ni
Cuando la primera oración lleva unidades que implican negación, el coordinador copulativo tiene que ser ni:
No come ni bebe.
Nada sé ni me importa.
Nadie nos llamó ni vino.

No obstante, ni también puede aparecer sin negación previa, pero en tal caso viene a ser la alternativa negativa de la partícula enfática hasta, que es positiva; por eso las dos oraciones siguientes expresan sentidos contrarios:
Me vio y ni me saludó.
Me vio y hasta me saludó.

lunes, 14 de diciembre de 2015

Complemento circunstancial de finalidad: oraciones y ejemplos



El concepto de finalidad se expresa mediante las oraciones finales, las cuales señalan la meta o el objetivo que indica la acción del verbo principal.
 
Existen diversas formas de expresar la finalidad o el propósito con que se realiza la acción indicada por el núcleo verbal.

Toda finalidad implica una intención por parte del sujeto, incluso aunque este no sea exactamente una persona; basta con presuponerla, como sucede en las oraciones pasivas, en las impersonales o en aquellas que no dicen quién realiza la acción pero en las que la intencionalidad se deduce del contenido oracional:
Conviene salir temprano para llegar a tiempo.

Construcción del complemento circunstancial de finalidad
a) Se puede formar con las preposiciones para, a, por + infinito:
Vine para verte.
Salió a saludarte.
Cantaron para complacerme.

b) Con una oración precedida de la conjunción que y las mismas preposiciones anteriores:
Vengo para (a, por) que conozcas a mi hijo.

Cuando el sustantivo significa finalidad
Tanto las oraciones como los infinitivos pueden también ser introducidos por locuciones más o menos fijas, formadas por un sustantivo que en sí mismo significa finalidad, como a fin de, con objeto de, con el propósito de. La diferencia está en que para introducir oraciones deben tomar la conjunción que:
Vengo con el objeto de ver a tu hijo.
Vengo con el objeto de que conozcas a mi hijo.

Qué estructuras pueden funcionar como complemento circunstancial de finalidad
Solo los infinitivos y las oraciones pueden funcionar como complemento de finalidad, pues en español no hay adverbios de significado final, y los sustantivos, aun cuando lleven la preposición para, no logran expresar claramente esa significación, sino otras similares, como destino o meta.

El significado de finalidad supone siempre una acción que se realiza con un determinado fin, y por eso solo resulta inequívoco como complemento circunstancial.

Cuando la construcción final cambia de sentido
Si complementa a un nombre puede ocurrir que el significado no sea exactamente el de finalidad sino el de cualidad de un objeto, o el de destino. Así, en una oración como Necesito lentes para ver de cerca, podemos interpretar el segmento con para como complemento circunstancial de finalidad (para eso necesito lentes), pero también como complemento determinativo, es decir, aludiendo a un determinado tipo de lentes (para ver de cerca o de lejos).

Cuando la secuencia con para depende de un elemento intensivo o enfatizador, la construcción más que final es exclamativa:
¡Tanto estudiar, para que ahora no encuentre trabajo!

En algunos casos, el segmento de finalidad depende de un cuantificador (suficientemente, tanto, etc.) y puede llevar un como delante:
Es lo suficientemente rápido como para que no lo alcance.
No comiste tanto como para sentirte mal.

Y cuando se subordina a los verbos copulativos ser y estar, adquiere una intensidad exclamativa:
¡Es para largarse a llorar!
¡Está para chuparse los dedos!

lunes, 2 de noviembre de 2015

Conectores adverbiales de tiempo en oraciones subordinadas



Las oraciones subordinadas adverbiales tienen la misma función que un adverbio, sirven para precisar o ampliar el significado del verbo principal.

Una oración subordinada es la que en las oraciones compuestas adjetivas, adverbiales y sustantivas depende de la principal. Los conectores adverbiales temporales pueden ser de anterioridad, posterioridad, simultaneidad, duración y repetición.

Oraciones temporales
Hay marcadores gramaticales que permiten relacionar dos sucesos desde un punto de vista temporal. Estos marcadores se pueden clasificar por el matiz temporal que añaden a la acción del verbo principal.

Marcadores para expresar acciones habituales, simultáneas y repetidas

  • Para expresar que una acción es habitual:
Cuando: es la forma más usada.
Cuando estaba en Sicilia, iba todos los días a la playa.

Todos los días cuando llego a casa me ducho.

  • Para expresar dos acciones simultáneas:
Mientras: Mientras yo compro en la carnicería, tú puedes ir al correo.
Mientras tanto: Ariel prepara la cena. Mientras tanto yo acuesto a los niños.

La diferencia entre mientras y mientras tanto es que en el segundo caso las informaciones que se presentan como contemporáneas son nuevas para el interlocutor. En cambio, la información introducida directamente por mientras ya es conocida por el interlocutor.

  • Para expresar que la acción se repite cada vez que se realiza la otra acción:
Siempre que: Siempre que escucho esta canción, me pongo a bailar.
Cada vez que: Cada vez que viene, trae regalos para todos.
Todas las veces que: Todas las veces que salgo con José, pasa algo.

Marcadores temporales que establecen un límite

  • Para expresar que una acción es inmediatamente posterior a otra:
Tan pronto como: Tan pronto como lleguen, nos iremos.
En cuanto: En cuanto termines de comer, nos vamos al cine.
Nada más: Nada más salir de casa, empezó a llover.

  • Para expresar el límite de la acción:
Hasta que (no): Hasta que no venga Juana, no nos podemos ir.

  • Para expresar que una acción es anterior a otra:
Antes de (que): Antes de firmar el contrato, hay que leerlo detenidamente.

Antes de la reunión, tenemos que hablar seriamente con Julián.

  • Para expresar que una acción es posterior a otra:
Después de (que): Después del examen, nos vamos a tomar unas tapas.

Después de que salgas del trabajo, iremos a comprar.

  • Para expresar el período de tiempo que separa dos sucesos:
Al cabo de, a los/las + cantidad de tiempo:
Nos vimos por primera vez en febrero y, al cabo de tres meses, nos casamos.

Cantidad de tiempo + después/más tarde:
Cogimos el avión a las tres y, quince minutos más tarde, tuvo que aterrizar.

Oraciones temporales con indicativo o con subjuntivo
En líneas generales, puede decirse que estos modificadores se construyen con modo indicativo cuando se refieren a un hecho efectivamente realizado o existente en el pasado o en el presente:
En cuanto lo supo, me llamó.

Cuando llega la primavera, María padece alergia.

En cambio, cuando el verbo principal de la oración remite al futuro, es decir, cuando remite a situaciones no realizadas aún, el modificador exige el modo subjuntivo:
En cuanto llegue a casa, te llamaré.

Me quedaré hasta que tú quieras.

Marcadores temporales con infinitivo
En este caso, el sujeto de las dos oraciones es el mismo:
Antes de terminar la carrera, empecé a trabajar.

Después de viajar a Sevilla, le cambió la vida.

Para reconocer las proposiciones adverbiales se puede utilizar el método de la sustitución, que en este caso será por un adverbio.


lunes, 12 de octubre de 2015

Oraciones subordinadas concesivas: conectores y ejemplos. Uso del aunque



Las oraciones concesivas indican una dificultad para la realización de la acción indicada por el verbo principal. El nexo más importante es aunque.

Las oraciones subordinadas concesivas expresan una objeción insuficiente para impedir la realización de lo que se dice en las principales, las cuales, por lo tanto, se cumplen efectivamente.

En español hay varios conectores para indicar la concesión, sin embargo, aunque es uno de los más importantes debido a la influencia modal que tiene sobre el verbo (indicativo/subjuntivo) que lo acompaña. Los otros nexos concesivos son a pesar de que, si bien, y eso que, por más que, por mucho que.

Oraciones concesivas con aunque + indicativo
Las oraciones concesivas con aunque van en indicativo cuando se dan juntas las siguientes condiciones:

- El hablante sabe que el contenido de la subordinada es cierto o verificable.
- El hablante sabe o supone que el oyente no conoce el contenido de la subordinada.

Es decir que aunque introduce una información nueva de la que el hablante informa al oyente:
Aunque José está enamorado de Carmen se casará con María.

El hablante sabe que es cierto que José está enamorado de Carmen y, además, sabe (o supone) que para el oyente es nueva la noticia de que José está enamorado de Carmen.

Subordinadas concesivas con aunque + subjuntivo
Usamos el verbo en subjuntivo cuando aunque introduce una información que ya es conocida por el oyente, presuponemos que conoce o no informamos de ello, sino que nos servimos de esa información para opinar:
Aunque estudie todos los días del año, no va a aprobar la materia.

Usamos el verbo en imperfecto del subjuntivo cuando además de mostrar un contraste:

- Queremos expresar un rechazo hacia la idea que se introduce con aunque, ya que la encontramos muy difícil de llevar a cabo o de creer.

- Queremos marcar que la idea que se introduce con aunque no sirve como argumento para cambiar de opinión:

Aunque estudiara todos los días, no aprobaría la materia.

Otros nexos concesivos
No todos los conectores concesivos tienen el mismo comportamiento sintáctico: algunos pueden ir con indicativo o subjuntivo siguiendo los mismos criterios vistos para aunque, otros solo pueden ir con indicativo (cuando el contenido de la subordinada es cierto o verificable), y algunos solo admiten el subjuntivo (cuando el contenido de la subordinada es hipotético).

Oraciones reduplicadas de subjuntivo
Estas construcciones pertenecen al grupo de las oraciones subordinadas concesivas, aunque esta vez se sustituyen los conectores por una estructura repetitiva cuyos verbos siempre se encuentran en modo subjuntivo:

Venga quien venga, la fiesta será un éxito.
Digan lo que digan, ellos son felices.
Hagas lo que hagas, Lucía siempre se enfada contigo.
Cocine lo que cocine, los niños nunca se comen la verdura.



lunes, 28 de septiembre de 2015

Oraciones subordinadas: clasificación, definición y ejemplos


Las oraciones subordinadas se clasifican en sustantivas, relativas o adjetivas, y adverbiales (causales, consecutivas, concesivas, finales, condicionales).
 
Las oraciones compuestas están formadas por dos o más oraciones simples unidas entre sí por coordinación o por subordinación. En la coordinación todas las oraciones se sitúan al mismo nivel, mientras que la subordinación establece una relación de dependencia jerárquica entre la subordinada y la principal.

Nexos subordinantes
Los principales nexos subordinantes son conjunciones o locuciones conjuntivas. Las conjunciones subordinantes encabezan siempre una oración, que subordinan a una palabra o a otra oración. Pueden introducir subordinadas sustantivas (Creo que hay huelga de autobuses) o subordinadas adverbiales (Hay huelga de autobuses, así que tenemos que ir en coche). Las oraciones subordinadas relativas (La huelga que han convocado para el lunes dejará la ciudad paralizada) están introducidas por pronombres o adverbios relativos. 

Son también nexos subordinantes los interrogativos y exclamativos que encabezan las subordinadas sustantivas interrogativas indirectas (No sé si hay huelga o no) y exclamativas indirectas (Es increíble cuántas huelgas hay).

Oraciones subordinadas sustantivas
Estas oraciones equivalen a un sintagma nominal, es decir que desempeñan la función que en una oración simple desempeñaría un nombre o equivalente. Dependen de un verbo, de un sustantivo o un adjetivo que las selecciona y tienen una función sintáctica (sujeto, complemento directo o complemento de régimen).

Una forma de reconocer una oración subordinada sustantiva consiste en sustituirla por el indefinido eso o algo: Me pidió el teléfono; Me pidió eso/algo.

Las subordinadas sustantivas están encabezadas por conjunciones subordinantes (que, si) o por pronombres interrogativos (qué, quién, etc.); también pueden construirse algunas sustantivas sin nexo (Me pidieron me detuviera).
Me gustaría que vinieras a mi fiesta.
Luis no sabe si Julio tiene razón.

Oraciones subordinadas relativas
Estas oraciones se llaman también subordinadas adjetivas porque desempeñan las mismas funciones que un adjetivo: califican o determinan a un sustantivo que aparece en la oración principal. Este sustantivo recibe el nombre de antecedente.
Los relativos tienen el mismo referente que su antecedente y desempeñan una función sintáctica en la oración subordinada que introducen. 
 Así, por ejemplo, en:
El libro que compré ayer es muy interesante.

El relativo que tiene el mismo referente que el antecedente libro y funciona como el complemento directo de compré.

Los nexos relativos son que, el cual, quien, cuyo, donde, cuando, como y cuanto.

Oraciones subordinadas adverbiales
Desde el punto de vista semántico, en las subordinadas adverbiales pueden distinguirse tres grandes ámbitos conceptuales: el de la causalidad, el de la temporalidad y el de la cantidad.

El ámbito de la causalidad abarca las oraciones subordinadas causales (a), consecutivas (b), finales (c), condicionales (d) y concesivas (e).
a) Como no tengo llaves, no puedo abrir.
b) No tengo llaves así que no puedo abrir.
c) No tengo llaves para poder abrir.
d) Si no tengo llaves, no puedo abrir.
e) Aunque tengo llaves, no puedo abrir.

El segundo ámbito semántico es el de la temporalidad. Dentro de él hay un solo grupo de subordinadas adverbiales: las temporales (Mientras hay vida, hay esperanza). Dentro del ámbito de la cantidad se incluyen las oraciones comparativas (Es tan alto como su padre).